A propósito de “Pipo”

Pipo, mi gato, que no es un gato cualquiera, y he de confensar que hay veces que me hace pensar muy seriamente en la reencarnación, en este caso en la de un ser especialmente evolucionado,él , como digo, me ha inspirado este cuento que ya algunos de vosotros conocéis.

El cuento fluyó fácil. Un día lo miré y sin pensarlo formulé un proyecto: “este gato necesita un cuento”. Y así fue como lo comuniqué al mejor pintor que yo conozco, que enseguida me envió unas ilustraciones llenas de color y fantasía. Increíblemente, en este caso, fueron antes los dibujos que el texto. Pero encajaron a la perfección ya que el ilustrador ha convivido y conoce muy bien al protagonista del cuento. Tras las ilustraciones brotaron las rimas en dos tiempos distintos. Me ceñí al principio de brevedad y esencialidad. Y éste ha sido el resultado.

La publicación del cuento fue fácil. Enseguida la editorial comprendió cómo quería la maquetación y ha resultado una edición muy bonita. Al tratarse de una edición financiada por mí yo me he tenido que quedar con cien ejemplares. Con ilusión doné uno a la biblioteca en la que trabajo, regalé a los compañeros que tienen niños pequeños, a amigos, a hermanos... Unos me han dado las gracias, otros me han dado su opinión... otros no me han dicho nada, de lo cual deduzco que no les ha gustado. Afortunadamente los niños no son así, lo cual me llena de alegría y de esperanza. El sábado recibí un audio de Enriquito, que me lo hubiera comido, con su vocecilla dándome las gracias. Y hoy una amiga me envía estas imágenes con la “critica literaria” que han hecho sus nietos. Os las incluyo porque son geniales.

"Me ha encantado mucho es precioso ya ves abajo el marcador cómo está pero es que no me creo del todo lo de Hillary y la historia de otro. (No puedes hablar sobre la historia de otro es imposible) Así que te pongo un 8"

"Me ha encantado hasta el 10 de verdad. ¿Cuándo se va a fiar de la nueva amiga? Es un gato viajero. Que gracias por regalarme el libro. Me he quedado impresionado, sin palabras.